John F. Kennedy, el creador de la gran, única y original “Alianza Para el Progreso” siempre decía que un país no se mide por su riqueza ni por su grandeza, sino por el nivel cultural de cada uno de sus habitantes. En honor a la verdad, comparto rotundamente esa frase.

Pero resulta que estamos en el Perú y sólo aquí se ve a una extranjera hija de un dictador con un 30% de aprobación, proclamando democracia e institucionalidad. Una institucionalidad que intenta construir a pesar de que su progenitor fue quien la destruyó. Vemos a un señor de tamaño jacarandoso que nunca ha agarrado un libro en su ricachona vida con un 10% de aprobación, gritando que mejorará la educación a pesar que sus universidades son de las peores en el Perú y además siendo acusado de plagiar (como el nombre de su partido – APP) una tesis doctoral. Vemos a un ex viceministro, ex pusilánime, ex oficialista y ex mandadero de Juan Jiménez Mayor ahora con un supuesto 10.4%, utilizando el floro barato de Ollanta Humala: “Estoy cansado de lo mismo”

Volviendo a lo que decía John F. Kennedy. ¿Quiénes creen en estas frases? Los pulpines, los que no leen, los que no indagan ni equiparan gestiones como para tener un análisis innato (…) Nuevamente nos agarran de bobos, nuevamente los chibolos que recién votan tienen que ser las víctimas del hambre político mal usado. Nuevamente las encuestan dan brillo a quien no ganará y oscuridad a quien le tienen miedo.

Es por eso que las encuestas en el Perú, no son nada más que un papel reemplazable al PH del servicio higiénico. Hago mofa y me río sarcásticamente de los pulipines que comparten encuestas diseñadas por un tocayo mío. Lamento herir los sentimientos ajenos, pero en enero 2011 primero estaba Toledo, segundo Luis Castañeda, tercero Keyko, cuarto su actual presidente y quinto PPK... en resumen y en criollo para que me entiendan. No se deje timar por encuestas, las encuestas son la meretriz de la política. Se venden al mejor postor y nunca son sinceras con la población. Hagámosle caso a John F. Kennedy y leamos más para ser moralmente un país en vías de desarrollo de verdad. No justifiquemos nuestra edad, yo también soy joven, tengo 21 años y también estoy cansado de la improvisación y la inexperiencia.

Anthony Tello Vásquez
Columnista de Opinión 

 @AnthonyTello10